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viernes, 16 de septiembre de 2011

El descosido


No existe nada más falso que tu propia mente.

Sí, así es. Procuraré explicártelo para que no lo entiendas.

Hasta que no rompes tu identificación con ella, eres incapaz de reconocer esta gran verdad, y aceptarla… y ‘triceversa’.

Aceptación y ruptura van de la mano, pues una conduce a la otra. Ambas se complementan.

En el vasto entramado mental, ningún descosido se abre si no existe previamente como tal, si antes no se produce el desgarro de un primer hilo. Y una vez que surge el agujero, la luz que emana a su través alumbra las fauces del engaño: ese monstruo parlanchín que se nos ha dado a conocer a través de sus propias descripciones sobre sí mismo y que nos mostrará el mundo según sus propios intereses (pasado y futuro).

Y ante la ceguera del destello, ante el desconcierto de lo que parece ‘no ser’, tu voluntad sigue siendo su voluntad, a no ser que percibas el silencio que brota del abismo tras la conciencia deshilachada, la quietud de la que nacen sus palabras.

Ante el sufrimiento, tu mente se apresurará a poner siempre en tus manos las mismas herramientas: hilo y aguja. En cambio, en los momentos plácidos, os regocijaréis por el mayor tiempo posible de la perfección y fortaleza de la costura realizada. Seréis uno, ante la imposibilidad de repartiros la autoría de tales proezas.

Para comprender con palabras, es preciso no comprender… tal vez con frases inconclusas cuyo razonamiento muere, necesariamente.

Aquí y Ahora es donde la mente calla, pierde el control y te lo cede a ti.

Dulces o salados, no son más que condimentos del mismo alimento que la sustenta.

Siendo lo más simple, es lo más difícil.

Control para observar sin más, o para volverlo a perder.

¿Vivir al máximo el presente? No. Permanecer conscientes es suficiente.

¿Utilidad? ¿Propósito? ¿Sentido de la vida? Por favor, déjale hablar (aceptación), pero no ignores su naturaleza y cuanto se distancia de ti (ruptura): identifica el parloteo a la luz del abismo tras el agujero… y responderás a estas preguntas y/o el por qué te las planteas (o incluso el por qué no aceptas que te las planteas), el por qué te interesa todo esto, (o el por qué presientes que en el fondo no te importa lo más mínimo), el por qué es tan vital, (o el por qué lo niegas)…

Tus únicas opciones son coser, o sentarte a mirar cómo se agranda el descosido, justo cuando lo observas.

No harás nada más trascendente en tu vida que una de estas dos cosas.


Safe Creative #1109170078136

viernes, 19 de agosto de 2011

La pérdida del ahora: el engaño fundamental

La mirada del ocaso - Playa de la Barrosa (Chiclana)


"Incluso si acepto completamente que en últimas el tiempo es una ilusión ¿qué diferencia va a causar esto en mi vida? Aún tengo que vivir en un mundo que está completamente dominado por el tiempo.

La aceptación intelectual es simplemente otra creencia y no cambiará mucho su vida. Para realizar esta verdad, usted tiene que vivirla. Cuando cada célula de su cuerpo esté tan presente que se sienta vibrar con la vida, y cuando usted pueda sentir en cada momento de la vida la alegría del Ser, entonces puede decirse que usted está libre del tiempo.

Pero todavía tengo que pagar las cuentas mañana, y me volveré viejo y moriré como los demás. ¿Cómo puedo decir que estoy libre del tiempo?

Las cuentas de mañana no son el problema. La disolución del cuerpo físico no es un problema.

El problema es la pérdida del Ahora, o más bien: el engaño central que convierte una mera situación, evento o emoción en un problema personal y en sufrimiento.

La pérdida del ahora es la pérdida del Ser.

Ser libre del tiempo es ser libre de la necesidad psicológica del pasado para su identidad y del futuro para su realización. Representa la transformación más profunda de la conciencia que usted pueda imaginar. En algunos casos raros, este cambio en la conciencia ocurre dramática y radicalmente, de una vez por todas. Cuando ocurre, generalmente viene por medio de una rendición total en medio de sufrimiento intenso.

La mayor parte de las personas, sin embargo, tiene que trabajar en ello.

Cuando usted ha tenido los primeros atisbos del estado intemporal de conciencia, comienza a avanzar y retroceder entre las dimensiones del tiempo y la presencia. Primero se vuelve consciente de cuán raramente su atención está realmente en el Ahora. Pero saber que no está presente es un gran éxito: este reconocimiento es presencia, incluso si inicialmente sólo dura un par de segundos del tiempo de reloj y se pierde de nuevo.

Después, con frecuencia creciente, usted escoge tener la atención de su conciencia en el presente, más que en el pasado o en el futuro y cada vez que se da cuenta de que había perdido el Ahora, puede permanecer en él, no por un par de segundos sino por periodos más largos percibidos desde la perspectiva externa del tiempo del reloj.

Así que antes de estar establecido firmemente en el estado de presencia, es decir antes de ser completamente consciente, usted fluctúa por un tiempo entre la conciencia y la inconsciencia, entre el estado de presencia y el de identificación con la mente.

Usted pierde el Ahora y vuelve a él, una y otra vez.

Eventualmente, la presencia se vuelve su estado predominante.

Para la mayor parte de las personas, la presencia no se experimenta nunca o sólo accidental y brevemente en escasas ocasiones, sin ser reconocida como lo que es. La mayoría de los seres humanos alternan, no entre conciencia e inconsciencia sino sólo entre distintos niveles de inconsciencia."


Eckhart Tolle - "El poder del ahora"

viernes, 26 de noviembre de 2010

Embudo temporal


No sabía cómo había podido llegar hasta allí, pero allí estaba.

A pesar de todo, su condición de hormiga no le permitía plantearse a fondo este tipo de cuestiones, tal vez a cambio de una incomprensible aptitud hacia ciertas proezas, a juzgar por seres de excelente raciocinio, do los hubiera.

Junto a un puñado de tierra blanca de granos bien definidos, había quedado encerrada en la cavidad inferior de un reloj de arena.

Incansablemente, sobre aquella superficie ‘innovadora’ y movediza, escudriñaba cada rincón en busca de una salida, y bien podría decirse que no sería el paso del tiempo lo que acabaría con toda su vitalidad, sino su dolorosa percepción del mismo: golpeada por su futuro inmediato, una lluvia feroz de piedras redondeadas, tan perseverante como ella, le provocaba dolor, al tiempo que la impulsaba con tesón hacia los límites de su celda.

Lo había probado todo, o casi todo, sin éxito alguno. Unas veces, trepando estoicamente por el montículo, creciente en altura y sufrimiento; otras, dejándose enterrar en su pasado, allá donde su movilidad sólo aparente la condenaba a pagar su imprudencia con intereses, hasta salir de nuevo a la superficie y reinventar su huída hacia ninguna parte.

En ocasiones, cesaba la rocosa tempestad y todo parecía aquietarse. Era entonces cuando, sin rozar siquiera el presente, lograba proyectarse hacia el futuro, mas no era sino más de lo mismo, un respiro fugaz e ilusorio en el que la bestia se vuelve para embestir de nuevo. Tras este revés, la caída se antojaba atroz, seguida nada menos que de una montaña… y vuelta al principio.

Esta historia no aportaría nada nuevo, de no ser por el prodigioso viaje que estaba a punto de emprender el insecto.

Ignorando la transparencia de su horizonte y acomodándose en la incertidumbre, ascendió por la pared cóncava de cristal siguiendo un camino espiral cada vez más inclinado. Agarrándose con firmeza a sus limitaciones, logró alcanzar el punto central en el que su vida era desgranada.

Con atención extrema hacia todo cuanto sucedía a su alrededor, el embudo se estrechó a su paso, hasta hacerse del diámetro justo de un único grano del rocoso elemento.

Su situación vital aún le exigía sortear obstáculos, pero ‘ahora’, justo en la frontera entre su pasado y su futuro, lo hacía de uno en uno. Cambiaba la trayectoria de cada piedra a su antojo e incluso era capaz, con su presencia, de detener la mismísima percepción del tiempo y el sufrimiento asociado a esta disfunción tan trascendental como desconocida.

Si bien una hormiga no precisa de ningún remedio para paliar un mal que no le acecha, la proeza de aquella criatura de rápidos andares y postura inmóvil, acompañada de cuantas cuestiones y sentimientos de inutilidad pueda suscitar tal ejercicio en semejante embudo temporal, sería a buen seguro incomprendida por determinados seres, tal vez a cambio de un extraordinario raciocinio, do los hubiera…


Safe Creative #1011277944101

viernes, 22 de octubre de 2010

Yo

Cementerio de Père-Lachaise (París)


"La mente busca alimento incesantemente, y no sólo para el pensamiento; está buscando alimento para su identidad, para su sentido del yo. Así es como el ego (el yo separado) viene a la existencia y se recrea continuamente a sí mismo.

Cuando piensas o hablas sobre ti, cuando dices "yo", sueles referirte a "yo y mi historia". Éste es el "yo" de lo que te gusta y de lo que te disgusta, de tus miedos y deseos, el "yo" que nunca está satisfecho por mucho tiempo. Es un sentido de quien eres creado por la mente, condicionado por el pasado y que trata de encontrar su realización en el futuro.

¿Puedes ver que este "yo" es pasajero, que es una formación temporal, como una onda que recorre la superficie del agua?

¿Quién ve que esto es así? ¿Quién es consciente de que tus formas física y psicológica son pasajeras?

Yo soy.

Este es el "yo" profundo que no tiene nada que ver con el pasado y el futuro.

¿Qué quedará de todos los temores y deseos asociados con tu problemática situación existencial que consumen cada día la mayor parte de tu atención? Un guión de varios centímetros de largo entre la fecha de tu nacimiento y la fecha de tu muerte inscritas en tu lápida.

Para el ego, éste es un pensamiento deprimente.

Para ti, es liberador."

Eckhart Tolle - "El silencio habla"

viernes, 20 de noviembre de 2009

Ira incomprendida (Reposición)

Atardecer en Medina Sidonia

¿Dónde estás cuando el fuego abrasa el horizonte?
¿Cuántas miradas bastan cada día para apaciguar su ira,
creciente como la ceguera?
¿Cuándo dejarás que sea éste, el ocaso de tu mirada...?

viernes, 13 de noviembre de 2009

Tejidos mentales (Reposición)


Corta el primer hilo, el más robusto y protegido y tira de él, verás toda una maraña que envuelve tu pensamiento y asfixia tu presente.

Corta el segundo, para comprender cómo se elabora ese entramado con tira-aflojas ajenos e incontrolados, siempre lejos de tu voluntad.

Tu tejedora no cesa de fabricar ese tejido que tan poco te agrada...

Identifica, corta y controla.

Identifica, corta y controla.

Identifica, corta y controla.

Identifica, corta y controla.

Identifica, corta y controla.

No abandones el presente.

viernes, 6 de noviembre de 2009

Verdadera riqueza (Reposición)

En la cima del monte Picacho (Alcalá de los Gazules)

Dejad que proclamen sus riquezas aquellos que, afinados sobre cáscaras de hormigón y sin presente alguno, se afanan por sustituir "ceros" por "unos" en el disco duro de alguna entidad bancaria, que yo seré, en estos parajes solitarios y mientras viva, el hombre más rico del mundo.

viernes, 16 de octubre de 2009

Pienso-miento (Reposición)

Obsérvate, pero no en un espejo.

Estudia el rostro de los demás, sus gestos...

...cuando les hablas y fijan su mirada en algún sitio
mientras asienten con la cabeza, absorbidos por el pensamiento...

...cuando van solos por la calle y durante un segundo
mueven sus manos al compás de una mueca en su cara,
como si hablaran...

...cuando compran acalorados y con los ojos brillantes,
o quedan absortos ante algún anuncio publicitario...

...o imaginan lo peor de toda una eternidad futura que, aunque sin
duda es tan improbable e incontenible en cualquier momento
presente, puede ser, en un solo segundo, contenido y representado
como tal en la mente... y simultáneamente sufrido...

... o recuerdan un pasado igualmente selectivo, inexistente ahora,
e igualmente sufrible, en igual mente.

Observa cómo te miran... sin verte.

Ese eres tú.

Basta ya, de pensar... y de mentir.




Dedicado a JUGUETE MENTAL,
mi primer gran buscador.

jueves, 20 de agosto de 2009

Tengo un problema

Nubarrones sobre el río Iro (Chiclana de la Frontera)

Cuando crees que tienes un problema... ¿no tienes la sensación de estar ante una gran nube oscura y amenazante?

Analicémoslo.

¿No es cierto que la preocupación originada por el problema está siempre basada en acontecimientos pasados o miedo al futuro? ¿No podrías seccionarla en infinidad de supuestas 'implicaciones negativas' que afectan a tu persona, ya sea directa o indirectamente, aplicadas a un gran número de situaciones pasadas o aún por venir en tu vida?

Pues bien, aun suponiendo que todas estos efectos sean realmente negativos, que ya es suponer y es otra historia, debes tener en cuenta esto: el momento que vives no podría soportar tanta negatividad simultánea, pero tu mente se encarga de hacértelo creer. Toda esa 'masa' negativa que imaginas contenida en la nube que se acerca o se aleja y no puedes dejar de observar, es incontenible en el presente, en el único instante en el que te encuentras y llegas a experimentar. Pero tu mente se lleva muy mal con el estado de 'presencia' y te hace salir de aquí una y otra vez.

Si no te convence esto, dime,

¿tienes algún problema ahora?

No ayer, ni hace una hora, ni siquiera diez minutos, ni dentro de cinco, ni después, ni a partir de mañana, ni el mes que viene, sino justo en este momento, ¿lo tienes? ¿verdad que no?

Esa es tu vida.

Siempre ha sido así y siempre lo será. Ocúpate de ella, pero en serio.

Personalmente, me ha aportado mucha positividad darme cuenta de que los problemas son como las nubes...

...sólo oscurecen en la lejanía...

...pero tengo un problema:

mi mente lo sabe...

sábado, 1 de agosto de 2009

Razón de ser

Barranco del paraíso (Almería)

¿Cuántas veces percibes durante del día tu 'estado mental', el trayecto de un determinado pensamiento, las diferentes sensaciones que te provoca, o la forma en que altera tu estado de ánimo? ¿nunca, 2, 5, 30, 150...?

¿Sabías al menos que esto no sólo es posible, sino que además ese 'darse cuenta' te sumerge en un 'proceso irreversible' de destrucción de tu 'falsa identidad del yo'?

En pocas palabras, desgraciadamente creemos que somos lo que pensamos ('lo que pensamos' = todo aquello que circula por nuestra mente), y justo cuando comienzas a observar tus pensamientos, comienzas a conocer a aquel que tenía una determinada idea sobre cómo eres, a aquel que creías ser, ubicándote eternamente en la planicie del centro, entre laderas de sufrimiento pasado y futuro...

... y entonces es cuando surge la nada...

... y te pierdes de tí mismo...

... y descubres que no sabes quién eres...

... y es entonces cuando estás más cerca de 'experimentarte'...

... pero igual de lejos de conocerte...

... pues jamás podrás hacerlo...

... porque el observador se ha fundido con lo observado...

... al observar una flor...

... de verdad ...

... sin la imagen de la flor que tenías en la cabeza...

... limpio de pensamientos y juicios mentales...

... al sentir el contacto del viento en tu piel...

... limpio...

... al sentir el latido de tu corazón, o dolor de cabeza...

... limpio...

... al oir el sonido más lejano, o ese ruido tan molesto...

... limpio...

... en comunión con el universo...

... y das la bienvenida a la nueva etapa evolutiva del ser humano...

... en la que finalmente Dios,...

... se contempla a sí mismo.


"¿nunca, 2, 5, 30, 150...?"

martes, 21 de julio de 2009

Sufre o sufre

Con frecuencia, la mente ofrece dos alternativas que, aunque distantes e incluso opuestas, son ambas generadoras de sufrimiento. Es común en estados e ansiedad, provocados por alguna adicción e incluso en procesos mentales ordinarios.

Es preciso comprender la naturaleza del pensamiento y contemplar la celda desde muy cerca, pero aún desde fuera, justo antes de dar el último paso. Una pausa, para interrumpir el proceso y dar paso al orden, antes practicado en situaciones inocuas y exigido ahora en todo su contraste, frente a la inercia mental, que no física y por lo tanto, vulnerable. La permanencia en este estado, garantiza la tercera opción: la elección mejor, exenta de sufrimiento.

Intervienen: la identificación de la celda-sufrimiento, el vacío mental, el estado de orden y la vigilancia permanente.

sábado, 11 de julio de 2009

Bendito aburrimiento

¿Cómo definirías el aburrimiento? ¿Tal vez la sensación de ausencia de estímulos que activen el proceso mental? ¿Qué tal una experiencia extraordinaria en la que, aún sin haberlo percibido, nos encontramos a escasa distancia del momento presente?

A mi juicio, son dos las evidencias que nos aporta ese magnífico estado.

La primera es, sin duda alguna, la mejor noticia que pueden darnos, pues nos revela en toda su amplitud, la adicción mental a todo cuanto NO ES, en contraposición a la aceptación de lo que ES, y por lo tanto nos permite visualizar la disfunción humana por excelencia, origen de todos los problemas.

La segunda, es el estrecho margen en el que nos sitúa con respecto al AHORA, donde realmente experimentamos la existencia, gracias a la ausencia de flujo mental hacia el pasado o el futuro, únicos lugares donde puede aflorar el malestar psicológico (sólo el dolor físico cabe en el presente).

En resumen, el aburrimiento es la oportunidad circunstancialmente 'forzada', y por lo tanto a todos accesible, de alcanzar la quietud; una puerta hacia la dimensión del conocimiento e inteligencia universales.

jueves, 9 de julio de 2009

Tejidos mentales

Corta el primer hilo, el más robusto y protegido y tira de él, verás toda una maraña que envuelve tu pensamiento y asfixia tu presente.

Corta el segundo, para comprender cómo se elabora ese entramado con tira-aflojas ajenos e incontrolados, siempre lejos de tu voluntad.

Tu tejedora no cesa de fabricar ese tejido que tan poco te agrada...

Identifica, corta y controla.

Identifica, corta y controla.

Identifica, corta y controla.

Identifica, corta y controla.

Identifica, corta y controla.

No abandones el presente.

martes, 7 de julio de 2009

Verdadera riqueza

En la cima del monte Picacho (Alcalá de los Gazules)

Dejad que proclamen sus riquezas aquellos que, afinados sobre cáscaras de hormigón y sin presente alguno, se afanan por sustituir "ceros" por "unos" en el disco duro de alguna entidad bancaria, que yo seré, en estos parajes solitarios y mientras pueda, el hombre más rico del mundo.

lunes, 6 de julio de 2009

Pienso-miento

Obsérvate, pero no en un espejo.

Estudia el rostro de los demás, sus gestos...

...cuando les hablas y fijan su mirada en algún sitio
mientras asienten con la cabeza, absorbidos por el pensamiento...

...cuando van solos por la calle y durante un segundo
mueven sus manos al compás de una mueca en su cara,
como si hablaran...

...cuando compran acalorados y con los ojos brillantes,
o quedan absortos ante algún anuncio publicitario...

...o imaginan lo peor de toda una eternidad futura que, aunque sin
duda es tan improbable e incontenible en cualquier momento
presente, puede ser, en un solo segundo, contenido y representado
como tal en la mente... y simultáneamente sufrido...

... o recuerdan un pasado igualmente selectivo, inexistente ahora,
e igualmente sufrible, en igual mente.

Observa cómo te miran... sin verte.

Ese eres tú.

Basta ya, de pensar... y de mentir.

domingo, 5 de julio de 2009

Ira incomprendida

Atardecer en Medina Sidonia

¿Dónde estás cuando el fuego abrasa el horizonte?
¿Cuántas miradas bastan cada día para apaciguar su ira,
creciente como la ceguera?
¿Cuándo dejarás que sea él el ocaso de tu mirada...?

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